Medicamentos para la Fiebre

La fiebre, también llamada calentura o temperatura no es una enfermedad, es un síntoma, y consiste un aumento anormal de la temperatura corporal. El uso de medicamentos para la fiebre también llamados antipiréticos está indicado para bajar la temperatura corporal alta evitando problemas mayores.

Normalmente la fiebre es una señal de que nuestro cuerpo está combatiendo una infección y, en cierta forma, ayuda estimulando el sistema inmunológico. Un aumento de la temperatura puede dificultar la supervivencia del virus o la bacteria al calentarse demasiado. Sin embargo, las investigaciones muestran que una fiebre alta con temperatura de 40°C o superior puede causar daños neurológicos, por lo que una persona debe evitarlo con la ayuda de medicamentos para la fiebre o en caso necesario buscar atención médica. Los medicamentos para la fiebre ayudan a reducirla con un efecto vasodilatador en el hipotálamo que es el órgano de nuestro cuerpo que regula la temperatura.

La temperatura corporal normal promedio es de unos 36,5°C. Las temperaturas más altas indican febrícula si no sobrepasa los 38 o fiebre si se alcanza más de 38°C.

La fiebre y la febrícula son términos médicos que se refieren a un aumento en la temperatura corporal normal, pero se diferencian en el grado de este aumento.

1. Fiebre: Se considera fiebre cuando la temperatura corporal supera los 38 grados Celsius (100.4 grados Fahrenheit). La fiebre es una respuesta del sistema inmunológico a una infección o enfermedad y puede acompañarse de otros síntomas como escalofríos, sudoración, dolor de cabeza y debilidad.

2. Febrícula: Se refiere a un ligero aumento en la temperatura corporal, generalmente entre 37.2 y 38 grados Celsius (98.96 y 100.4 grados Fahrenheit). La febrícula puede ser difícil de detectar debido a que los síntomas suelen ser más leves que en el caso de la fiebre. A menudo, la febrícula puede ser un signo de que el cuerpo está luchando contra una infección menor.

Es importante tener en cuenta que tanto la fiebre como la febrícula son síntomas, no enfermedades en sí mismas. Si tienes fiebre o febrícula persistentes, es importante buscar atención médica para determinar y tratar la causa

Los medicamentos sin receta médica para reducir la fiebre son analgésicos y antipiréticos que se pueden adquirir en farmacias sin necesidad de prescripción médica o en Farmacias autorizadas para la venta online. Estos medicamentos están diseñados para reducir la temperatura corporal y aliviar el dolor y la inflamación asociados con la fiebre.

Los medicamentos sin receta para reducir la fiebre más comunes incluyen el paracetamol, el ibuprofeno y la aspirina. Cada uno de estos medicamentos tiene diferentes mecanismos de acción y efectos secundarios, por lo que es importante leer las etiquetas y seguir las dosis recomendadas.

• El paracetamol es un analgésico y antipirético que se utiliza comúnmente para tratar la fiebre y el dolor leve a moderado, como dolores de cabeza, dolores musculares y dentales. Es considerado seguro para la mayoría de las personas, aunque en dosis altas puede causar daño hepático.
• El ibuprofeno también es un analgésico y antipirético, y se utiliza para reducir la fiebre y el dolor, incluyendo dolores de cabeza, dolores menstruales y dolores musculares y articulares. Al igual que el paracetamol, es considerado seguro para la mayoría de las personas, aunque su uso prolongado puede causar problemas gastrointestinales y daño renal.
• La aspirina también tiene propiedades analgésicas y antipiréticas, y se utiliza comúnmente para tratar la fiebre y el dolor. Sin embargo, debido a que la aspirina también actúa como anticoagulante, puede aumentar el riesgo de sangrado, especialmente en personas que están tomando otros medicamentos anticoagulantes.

Es importante tener en cuenta que, si bien estos medicamentos pueden ayudar a reducir la fiebre y aliviar el dolor, no tratan la causa subyacente de la fiebre. Si la fiebre persiste durante varios días o está acompañada de otros síntomas graves, como dificultad para respirar, dolor en el pecho o dolor abdominal intenso, se debe buscar atención médica de inmediato.

En general, los medicamentos sin receta para reducir la fiebre son seguros cuando se usan según las dosis recomendadas y no se utilizan durante un período prolongado de tiempo. Sin embargo, es importante leer las etiquetas y seguir las instrucciones cuidadosamente, y consultar a un médico o farmacéutico si tiene alguna pregunta o inquietud sobre su uso.

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