La abstinencia del Tabaco

No fumo desde hace una semana y ahora tengo abstinencia, estoy “depre”, “insoportable”. !No me aguanto ni yo!

He dejado de fumar y me encuentro peor. Estas son frases muy habituales durante las primeras semanas después de dejar el tabaco, es muy posible que experimentes abstinencia. En este blog, queremos ayudarte con algunos pasos sencillos que puedes seguir para iniciar tu camino hacia una vida libre de tabaco superando la abstinencia y el tabaquismo.

¿Pero, qué es la abstinencia tabáquica?

La abstinencia tabáquica o abstinencia del tabaco, es un conjunto de síntomas físicos y psicológicos que experimenta una persona cuando reduce drásticamente su consumo de tabaco. Estos síntomas son una respuesta natural del cuerpo a la falta de nicotina, una sustancia adictiva presente en los productos de tabaco. La abstinencia del tabaco puede variar en intensidad y duración de una persona a otra, pero generalmente alcanza su punto máximo en las primeras semanas y disminuye gradualmente con el tiempo. Presenta síntomas como:

• Deseo intenso de fumar
• Los antojos, son el deseo intenso de fumar y pueden ser desencadenados por situaciones, emociones o actividades asociadas con el hábito de fumar.
• Desasosiego
• Inquietud, alteración, falta de reposo
• Depresión
• El abandono de la nicotina a menudo va asociado a una sensación de pesimismo y pensamientos negativos
• Insomnio
• Dificultad para dormir bien y conciliar el sueño
• Irritabilidad
• Temperamento explosivo y se enoja fácilmente.
• Falta de concentración
• Desmotivación, desinterés.
• Aumento del apetito y cambios en el peso 
• Algunas personas experimentan un aumento del apetito y esto puede llevar a un aumento de peso.

Enfrentarse a estos síntomas es crucial para no volver a fumar. Es importante recordar que la abstinencia tabáquica es temporal y que los síntomas disminuirán con el tiempo, los más intensos tienden a disminuir en un período de 2 a 4 semanas después de dejar el tabaco. Sin embargo los antojos ocasionales, pueden persistir más.

¿Con todo esto por delante, podré dejar el tabaco algún día?. 

La respuesta es sí: “el día que yo decida”. Dejar el tabaco es un gran esfuerzo y un desafío considerable, pero, con un plan adecuado y fuerza de voluntad, puede ser más llevadero y por supuesto, posible. En este blog queremos ayudarte con algunos pasos sencillos que puedes seguir para iniciar una vida sin tabaco.

• El primer paso para dejar el tabaco es decidir una fecha.
• Elige una fecha de comienzo, toma tu tiempo para prepararte y desarrollar la confianza necesaria, no la retrases demasiado pues puede disminuir tu motivación. Una fecha dentro de una o dos semanas es ideal para mantener el impulso.
• Antes de renunciar al hábito, es importante comprender por qué lo deseas. Hazte preguntas como:
  
  
• ¿En qué afecta el tabaco a mi salud?
• ¿Cómo mejorará mi vida si dejo de fumar?
• ¿Qué es lo qué no me gusta del tabaco?
• ¿Qué me pierdo cuando fumo?
• ¿Molesto a mi familia si estoy fumando?

Ten claras las respuestas y pide ayuda si es necesario.

¿Cómo controlo las ganas de fumar?

Identificar lo que desencadena esas “ganas locas de fumar”, puede ayudarte a desarrollar estrategias para tomar el control de las mismas. Por ejemplo, la frase: “cuando me tomo el café siempre me fumo un cigarrito” o “después de comer me apetece fumar”. Son desencadenantes típicos que te generan esa ansiedad de fumar.

Este tipo de antojos suelen ser intensos pero habitualmente de corta duración. Prepara un “contraataque” para generar una respuesta inmediata que pueda neutralizar esa ansiedad de fumar cuando sientas este tipo de antojos. Por ejemplo: 

• Ante: “cuando me tomo el café siempre me fumo un cigarrito”
• Contraataca con: “bebo agua, mastico un chicle o camino un rato”.

La idea es cambiar/romper la rutina para resistir la ansiedad.

¿Cuánto dura la abstinencia del tabaco?. Etapas del síndrome de abstinencia del tabaco.

Aquí tienes una lista general de las etapas que suelen experimentar muchas personas al dejar de fumar, Recuerda que cada persona es diferente y puede experimentar las etapas de abstinencia de manera diferente:

1. Día 1 al 3: Frases como: “estoy dejando de fumar y me he fumado un cigarro” son típicas durante los primeros días. Las primeras 24 a 72 horas después de dejar de fumar, los síntomas de abstinencia suelen ser más intensos. Irritabilidad, ansiedad, dificultad para concentrarte, inquietud, insomnio, aumento del apetito y fuertes antojos de nicotina. Estos son los peores días cuando dejas de fumar.
2. Día 4 al 7: Los síntomas físicos de abstinencia disminuyen, aunque puedes experimentar síntomas psicológicos, como ansiedad y cambios de humor. Notarás mejoras en la capacidad pulmonar y respiratoria.
3. Semana 2 al 4: “llevo 15 días sin fumar” Los síntomas físicos de abstinencia disminuyen significativamente. Sin embargo, los antojos ocasionales de nicotina y los síntomas emocionales, como la ansiedad y la irritabilidad, aún pueden estar presentes. Aparecen altibajos emocionales a medida que te adaptas a la vida sin tabaco.
4. Mes 1 al 3: ¡Un mes sin fumar y me encuentro peor!. Has pasado lo peor. Los síntomas de abstinencia disminuyen aún más. Los antojos serán menos frecuentes y menos intensos, y vas estando más cómodo en tu nueva vida sin fumar. Tu capacidad pulmonar y cardiovascular seguirá mejorando gradualmente.
5. Mes 3 en adelante:Síntomas de abstinencia más leves. Los antojos pueden ocurrir ocasionalmente, especialmente en situaciones de estrés o desencadenantes específicos. Sin embargo, muchos ex fumadores informan que los antojos disminuyen en intensidad y frecuencia con el tiempo.
6. Al año más o menos desaparecerán las ganas de fumar casi por completo, pero, cuidado, puede aparecer un detonante no previsto: “llevo un año sin fumar y tengo ganas”. Activa todas las alarmas y genera una respuesta inmediata que pueda neutralizar esa ansiedad y ganas de fumar, por ejemplo realiza una actividad deportiva, o alguna actividad que te guste y mantente ocupado.

Otra opción efectiva y que te puede ayudar es la Terapia Sustitutiva de la Nicotina (TSN).

Consiste en proporcionar nicotina de forma controlada al cuerpo sin fumar cigarrillos, lo que ayuda a reducir la dependencia física de la nicotina. La TRN utiliza productos que contienen nicotina pero no otros productos químicos dañinos presentes en los cigarrillos. Estos productos alivian los síntomas de abstinencia y reducen los antojos intensos. Con el tiempo, se reduce gradualmente la cantidad de nicotina administrada para adaptar el cuerpo a menos nicotina. Estos medicamentos están disponibles en diferentes formatos como losChicles de nicotina, Parches de nicotina para dejar de Fumar.

Los parches de nicotina para dejar de fumar son un método muy popular que te ayudará en este proceso 

¿Es efectiva la Terapia Sustitutiva de la Nicotina (TSN) para dejar el tabaco?

Sí, los tratamientos de terapia sustitutiva de la nicotina TSN o también llamados de reemplazo de nicotina TRN, han demostrado ser efectivos en ayudar a las personas a dejar de fumar. Numerosos estudios científicos respaldan su eficacia. Al proporcionar una cantidad controlada de nicotina al cuerpo sin los productos químicos tóxicos presentes en los cigarrillos, la TSN ayuda a reducir los síntomas de abstinencia y los antojos intensos asociados con las ganas de fumar.

La efectividad de la TSN varía de una persona a otra, y puede depender de factores como la motivación del individuo, la adherencia al tratamiento y el uso adecuado de los productos de TSN. Sin embargo, se ha demostrado que la TSN aumenta significativamente las tasas de éxito en comparación con intentos de dejar el tabaco sin ningún tipo de ayuda.

Es importante destacar que esta terapia es más efectiva cuando se utiliza como parte de un enfoque integral que incluye apoyo psicológico, cambios en el estilo de vida y estrategias para abordar los aspectos emocionales y comportamentales de la adicción al tabaco. Consultar con un profesional de la salud, como un médico o un especialista en dejar de fumar, puede brindar orientación y aumentar las posibilidades de éxito al utilizar la terapia de reemplazo de nicotina.

¿Qué otras opciones tengo para dejar de fumar?

Hoy en día existen recursos y programas que pueden ayudarte con un apoyo adicional, como programas de los servicios de salud públicos, clínicas especializadas o simplemente tu familia y amigos.